En mayo de 1925 no existía ninguna federación de
ajedrez en España, sólo unos meses después se
crearía la primera: la catalana. Sin embargo, en
varias provincias y regiones, con un gran esfuerzo
de organización, ya se jugaban distintos
campeonatos regionales y locales. En la Región
valenciana, que desde la división de territorial
de 1833 estaba conformada por Valencia, Alicante y
Castellón, decidieron que era el momento de dar
un paso adelante y pusieron en marcha un
campeonato regional con jugadores de las tres
provincias. Como la propia organización
reconoció, se trataba de dar algo de lustre al
abandonado ajedrez valenciano.
La competición se jugaría en el Ateneo Mercantil
de Valencia, entidad que la patrocinó, y
comenzaría en el mes de mayo, abriéndose un
plazo de inscripción que finalizaría el 30 de
abril y para el cual había que abonar 25 ptas y
certificar ser residente de alguna de las tres
provincias. Realmente estamos ante el primer
campeonato regional de la zona valenciana, ya que se
estipuló que el ganador conseguiría el título
de campeón, así como una copa y la mitad de las
inscripciones.
El tiempo pasó rápido y la fecha para la
inauguración apareció en el listado de actos del Ateneo
Mercantil: el 18 de mayo. Y llegó el esperado
día, el salón gótico del Ateneo lució sus
mejores galas y por él discurrieron distintas
personalidades que fueron dando lucidos discursos
sobre la bonanza del ajedrez: tomaron la palabra
Mariano Gómez (presidente del Ateneo y del
campeonato), José Bellver (director del torneo)
y Ricardo Roselló (considerado el mejor jugador
de Valencia en aquella época, que en sus palabras
mostró su extrañeza por la tardanza en dar al
ajedrez la importancia que realmente tenía).
Estos fueron los premios reunidos:
Primer
clasificado: Copa donada por el Ateneo
Mercantil, título de campeón, 50% de las
inscripciones y copa donada por el
Gobernador Civil.
Segundo
clasificado: Diploma de principal, el
30% de las inscripciones y premio
donado por el Alcalde de Valencia.
Tercer
clasificado: Diploma de honor, el 20%
de las inscripciones y premio.
Restantes
premios: según orden de
clasificación se entregaron el resto de
premios donados por las autoridades y
particulares. |
Todo estaba perfectamente organizado, incluso se
editó un libro con las bases y normas del
torneo. Sin embargo, sorprendentemente la prensa se olvidó por
completo de la competición, ni una referencia se
encuentra a los resultados o a los participantes.
Pueda parecer que el torneo no se llegó a jugar
por algún tipo de contratiempo, pero tras
consultar al Ateneo Mercantil me han confirmado
que existe un documento en el que se dice que el
torneo se estaba jugando el 28 de mayo... pero
nada más. Es una lástima que tras tanto
trabajo, la prensa no se ocupase de cubrir un
acontecimiento tan importante, creando una enorme
laguna en el comienzo de la historia del ajedrez
moderno en Valencia. |