El
prestigioso triunfo de Medina en el US Open

( Autor: ©
Javier Cordero Fernández )
Hay triunfos que sobresalen por encima del resto por su dificultad.
Pero el hito logrado por Medina en el US Open de 1962,
cuando los éxitos internacionales escaseaban en el
ajedrez español, puede catalogarse de sensacional. Y es
que conseguir un triunfo en un torneo de esa envergadura
es una tarea complicada. El US Open es una competición
con solera, se juega desde 1900 y su palmarés cuenta con
nombres ilustres como Fischer (1957, con sólo 14 años),
Korchnoi, Spassky o Larsen (vencedor en dos ocasiones),
además de los jugadores norteamericanos más célebres
como Reshevsky, Fine o Benkö. Otros nombres llamativos
dan lustre a la lista de ganadores, como Carlos Torre Reppetto (que
venció en 1924) o Judit Polgar (que venció en 1998).
Cada año al US Open acuden los maestros estadounidenses
más destacados y varios maestros extranjeros que buscan
llevarse un buen botín. La bolsa de premios del torneo
siempre ha sido importante y así lo fue en 1962: con un
cuota de inscripción de 20$, cualquier jugador podía
participar y pelear por los suculentos premios: 1º 1.000$,
2º
500$, 3º 300$, 4º 200$, 5º 100$, 6º al 10º 50$, 11º al
15º 25 $.
Históricamente los premios del US Open siempre han sido
muy codiciados, aunque tal vez nunca lo fueron tanto como
en 1955, año en que el ganador recibió un coche Back
Century; el afortunado fue el talentoso Nicolas Rossolimo,
que finalizó empatado con Reshevsky y al que pudo superar
de forma apurada en el coeficiente de desempate.

Buick
Century de 1955
En la década de los 60 el ajedrez estadounidense no se encontraba en una situación boyante, se organizaban pocos torneos y la actividad era
prácticamente estatal, por lo que los profesionales tenían dificultades para poder serlo. Por eso, este tipo de torneos atraían a esos nómadas del tablero que se desplazaban de ciudad en ciudad, de país en país, buscando un sustento que muchas veces dependía de su rendimiento en
ese torneo. Otro buen ejemplo es el Open de Lone Pine (que
se jugó en los años 70), que contaba con jugosos premios
donados por su creador: Louis D. Stahman. Este industrial
jubilado había hecho fortuna inventando y produciendo
material médico, y dio rienda suelta a la pasión que
sentía por el ajedrez organizando un torneo que en cada
edición logró
atraer a decenas de maestros llegados de distintas partes
del mundo. Además, Stahman quiso estimular la
competitividad de los participantes dando premios en
metálico a la partida más brillante de cada ronda,
medida que dio todavía más popularidad a su torneo y que
sirvió para que los jugadores que se quedaban sin
opciones de luchar por los primeros puestos pudieran
pelear por estos premios asumiendo riesgos en sus partidas. La
verdad es que este tipos de torneos, prácticamente
testimoniales, no parecían una buena base para que el
ajedrez creciese en el país y eso que se contaba con el
enorme tirón de los triunfos de Fischer.
En la
edición de 1962 se escogió como sede la ciudad de San
Antonio (Texas), estado que en ocasiones parece vivir
aparte del resto del país, con sus propias ideas (a veces
difíciles de asimilar) y sus grandes ranchos. Y hacia esa peculiar
tierra se dirigieron Medina y otros 143 ajedrecistas, en
pleno Agosto (se jugó del 13 al 25 de ese mes), para
competir sin tregua durante 12 rondas en el Connie Leeger Center.
Por aquel entonces Medina residía en Venezuela, país en
el que se había establecido en 1953 tras una gira de
torneos que había realizado por Sudamérica (Río de
Janeiro, La Habana y Caracas). Y en Caracas no estuvo
sólo de paso, ya que decidió quedarse atraído por las
buenas perspectivas económicas que ofrecía un país en
crecimiento. Allí trabajó en un laboratorio farmacéutico,
como profesor de ajedrez, como columnista de ajedrez en
los diarios "El Nacional" y "El
Universal" y finalmente impartiendo clase en la
Escuela Técnica de Ingeniería. Antes de acudir al US
Open de 1962 había decidido regresar a España, ya que en
la FEDA se había producido un cambio de presidente y el
nuevo dirigente le había dado buenas perspectivas de
futuro en el ajedrez nacional. Por este motivo, Medina
llegó en gran forma a Estados Unidos, ya que, liberado de
sus ocupaciones laborales, había dispuesto de más tiempo
para prepararse.

Medina
vs Gilden, última ronda del US Open de 1962
Cualquiera que haya participado en un torneo de estas
características podrá dar fe de las dificultades que hay
que pasar para poder optar a los primeros puestos... y
esta vez no fue una excepción. No sólo es complicado
enfrentarse a los maestros más destacados, también hay
que hacer frente a jugadores que si bien no son
profesionales, pueden ser muy peligrosos y generan
sorpresas en cada ronda. Medina demostró desde el
principio que su presencia no iba a ser testimonial, de
hecho encabezó el torneo prácticamente en todo momento
hasta la ronda 8, en la que Robert Byrne logró frenarle. Medina
encaró las últimas 4 rondas bien
situado, pero a un punto de Byrne, Bisguier y Stephen
Jones, y a medio de Lombardy. Sin duda, no era el favorito
para nadie. Sin embargo, el español supo rehacerse a la
derrota sufrida ante Byrne y comenzó a encadenar un
triunfo tras otro, reduciendo la distancia que le separaba
del grupo de cabeza... y no
fue sencillo, su victoria ante Lapiken significó un gran
esfuerzo que pudo haberle pasado factura: la partida
comenzó a las 19h y finalizó a las 3 de la madrugada
tras 88 jugadas; la siguiente ronda comenzaba a mediodía.
Byrne cedió inesperadamente ante Stephen L. Jones en la
novena ronda tras dejarse una pieza en un error
sorprendente, lo que dejaba a Jones como líder en
solitario... un líder frágil que se hundió estrepitosamente
perdiendo las 3 últimas partidas, pasando de gran
favorito al triunfo final a finalizar 12º. Y de
este modo llegó la penúltima ronda, con Bisguier en
cabeza seguido a sólo medio punto por Medina y Benkö...
y Medina jugaba con Bisguier. Como en la mayoría de las
partidas del torneo, Medina planteó una lucha posicional,
en esta ocasión con mucha tensión en el flanco de rey, y
poco a poco logró aprovechar la mejor colocación de sus
piezas hasta lograr una victoria que le dejaba en cabeza
del torneo, empatado con Benkö, antes de la última y
decisiva ronda. Medina ya había jugado con los rivales
más fuertes (entabló con Benkö y Lombardy), mientras que
Benkó se tuvo que enfrentar a Lombardy y Bisguier a Byrne.
Sus 4 rivales entablaron sus partidas, mientras Medina se
volvía a embarcar en una lucha posicional ante Gilden,
campeón junior de Estados Unidos, que condujo con
maestría hasta una clara victoria que le sirvió para
finalizar en primera posición en solitario. Medina
seguía haciendo historia, historia del ajedrez español,
logrando un hito que solamente Arturo Pomar había
conseguido con anterioridad (en 1954 había triunfado en
el US Open tras finalizar empatado en primera posición
con Larry
Melvin Evans).

Medina
posando con el trofeo de ganador
Las partidas de Medina en el US Open han permanecido
ocultas durante todos estos años, no aparecían en las
bases salvo algún caso excepcional, aunque Eduardo Bauzá, tras
buscar en revistas estadounidenses, ha logrado encontrar 10 de las 12 partidas
de Medina, a lo cual hay que sumar otra encontrada por Teo
Borras, las cuales podéis descargar a continuación.
Por último, cerremos este artículo con la clasificación
del torneo en sus primeros 50 puestos:
Clasificación
US
Open 1962
Descargar
11 partidas de Medina en el torneo |
 |
|
|
1
|
2
|
3
|
4
|
5
|
6
|
7
|
8
|
9
|
10
|
11
|
12
|
Puntos
|
1
|
Medina, Antonio
|
1:92
|
1:48
|
1:19
|
1:23
|
½:3
|
1:31
|
½:2
|
0:5
|
1:32
|
1:17
|
1:4
|
1:18
|
10.0
|
2
|
Benkö, Pal
|
1:55
|
1:51
|
1:24
|
1:20
|
1:13
|
½:5
|
½:1
|
0:4
|
1:34
|
1:6
|
1:12
|
½:3
|
9.5
|
3
|
Lombardy, William J.
|
1:63
|
1:78
|
1:32
|
1:31
|
½:1
|
½:4
|
½:20
|
1:21
|
1:18
|
½:5
|
1:8
|
½:2
|
9.5
|
4
|
Bisguier, Arthur
|
1:80
|
1:71
|
1:15
|
½:7
|
1:8
|
½:3
|
1:23
|
1:2
|
½:6
|
1:12
|
0:1
|
½:5
|
9.0
|
5
|
Byrne, Robert
|
1:64
|
1:85
|
½:21
|
1:22
|
1:10
|
½:2
|
1:14
|
1:1
|
0:12
|
½:3
|
1:31
|
½:4
|
9.0
|
6
|
Harrow, Martin
|
1:82
|
1:66
|
0:12
|
1:75
|
1:135
|
½:7
|
1:22
|
1:20
|
½:4
|
0:2
|
1:14
|
1:13
|
9.0
|
7
|
O'Keefe, Jack
|
1:68
|
½:49
|
1:73
|
½:4
|
1:21
|
½:6
|
1:24
|
0:12
|
½:20
|
1:34
|
1:36
|
½:10
|
8.5
|
8
|
Fdez. León, José
|
1:123
|
1:40
|
1:33
|
½:9
|
0:4
|
½:45
|
½:85
|
1:48
|
1:26
|
1:11
|
0:3
|
1:12
|
8.5
|
9
|
Burger, Karl
|
1:102
|
1:46
|
1:50
|
½:8
|
½:26
|
0:23
|
1:16
|
½:11
|
0:21
|
1:48
|
1:24
|
1:22
|
8.5
|
10
|
Davila, Edmundo
|
1:65
|
½:52
|
1:130
|
1:15
|
0:5
|
0:22
|
1:30
|
½:50
|
1:47
|
1:29
|
1:32
|
½:7
|
8.5
|
11
|
Matzner, Stephen
|
1:104
|
0:69
|
1:83
|
½:66
|
1:49
|
1:35
|
½:43
|
½:9
|
1:23
|
0:8
|
1:20
|
1:32
|
8.0
|
12
|
Jones, Stephen
|
1:76
|
1:60
|
1:6
|
0:21
|
1:34
|
1:71
|
1:18
|
1:7
|
1:5
|
0:4
|
0:2
|
0:8
|
8.0
|
13
|
Szedlacsek, Louis
|
1:89
|
1:45
|
1:16
|
1:36
|
0:2
|
0:14
|
1:52
|
0:32
|
1:78
|
1:66
|
1:21
|
0:6
|
8.0
|
14
|
Sandrin, Angelo
|
1:86
|
½:37
|
½:59
|
1:53
|
1:42
|
1:13
|
0:5
|
0:34
|
1:46
|
1:43
|
0:6
|
1:33
|
8.0
|
15
|
Finegold, Ronald
|
1:56
|
1:47
|
0:4
|
0:10
|
1:121
|
½:130
|
½:35
|
1:65
|
1:38
|
0:18
|
1:45
|
1:34
|
8.0
|
16
|
Sullivan, Joseph
|
1:77
|
1:81
|
0:13
|
1:69
|
0:18
|
1:82
|
0:9
|
1:79
|
1:35
|
½:20
|
½:17
|
1:53
|
8.0
|
17
|
Lapiken, Peter
|
1:70
|
0:33
|
1:67
|
½:45
|
0:44
|
1:60
|
1:130
|
1:47
|
1:27
|
0:1
|
½:16
|
1:41
|
8.0
|
18
|
Gilden, Lawrence
|
1:67
|
1:42
|
½:22
|
½:52
|
1:16
|
1:36
|
0:12
|
1:25
|
0:3
|
1:15
|
1:23
|
0:1
|
8.0
|
19
|
Payne, John
|
1:126
|
1:84
|
0:1
|
1:33
|
½:43
|
½:44
|
0:66
|
0:35
|
1:74
|
1:79
|
1:37
|
1:31
|
8.0
|
20
|
Zuckerman, Bernard
|
1:101
|
1:38
|
1:27
|
0:2
|
1:52
|
1:26
|
½:3
|
0:6
|
½:7
|
½:16
|
0:11
|
1:48
|
7.5
|
21
|
Formanek, Edward
|
1:118
|
1:87
|
½:5
|
1:12
|
0:7
|
1:40
|
1:39
|
0:3
|
1:9
|
½:31
|
0:13
|
½:23
|
7.5
|
22
|
McCormick, Edgar
|
1:100
|
1:61
|
½:18
|
0:5
|
1:41
|
1:10
|
0:6
|
1:39
|
0:31
|
1:84
|
1:25
|
0:9
|
7.5
|
23
|
Smith, Kenneth
|
1:99
|
1:75
|
1:28
|
0:1
|
1:78
|
1:9
|
0:4
|
1:66
|
0:11
|
1:44
|
0:18
|
½:21
|
7.5
|
24
|
Saltzberg, Mitchell
|
1:91
|
1:43
|
0:2
|
1:59
|
½:40
|
1:48
|
0:7
|
0:44
|
1:81
|
1:53
|
0:9
|
1:46
|
7.5
|
25
|
Burgar, Wesley
|
1:121
|
½:130
|
½:35
|
½:38
|
½:66
|
1:59
|
1;45
|
0:18
|
½:42
|
1:30
|
0:22
|
1:43
|
7.5
|
26
|
Brieger, Robert
|
½:95
|
1:94
|
1:37
|
1:49
|
½:9
|
0:20
|
½:44
|
1:111
|
0:8
|
½:42
|
½:46
|
1:47
|
7.5
|
27
|
Lux, Tom
|
1:54
|
1:138
|
0:20
|
0:43
|
1:70
|
0:37
|
1:67
|
1:115
|
0:17
|
1:61
|
1:66
|
½:29
|
7.5
|
28
|
Burkett, Max
|
1:117
|
1:57
|
0:23
|
1:80
|
0:31
|
1:58
|
0:34
|
½:81
|
1:63
|
½:33
|
½:43
|
1:54
|
7.5
|
29
|
Trwin, Peter
|
1:129
|
½:59
|
0:49
|
1:111
|
½:47
|
0:66
|
1:55
|
1:45
|
1:85
|
0:10
|
1:44
|
½:27
|
7.5
|
30
|
Suraci, Anthony
|
½:94
|
½:95
|
1:123
|
0:82
|
1:107
|
½:88
|
0:10
|
1:97
|
1:60
|
0:25
|
1:81
|
1:58
|
7.5
|
31
|
Lyman, Shelby
|
1:97
|
1:53
|
1:135
|
0:3
|
1:28
|
0:1
|
1:78
|
½:36
|
1:22
|
½:21
|
0:5
|
0:19
|
7.0
|
32
|
Morgan, Charles
|
1:98
|
1:62
|
0:3
|
0:40
|
1:99
|
1:69
|
1:37
|
1:13
|
0:1
|
1:36
|
0:10
|
0:11
|
7.0
|
33
|
Hidalgo, Charles
|
1:110
|
1:17
|
0:8
|
0:19
|
0:56
|
1:126
|
½:97
|
1:54
|
1:39
|
½:28
|
1:51
|
0:14
|
7.0
|
34
|
Cunningham, Walter
|
0:83
|
1:139
|
1:92
|
1:46
|
0:12
|
1:75
|
1:28
|
1:14
|
0:2
|
0:7
|
1:38
|
0:15
|
7.0
|
35
|
Zangerle, Karl
|
½:108
|
1:72
|
½:25
|
½:71
|
1:82
|
0:11
|
½:15
|
1:19
|
0:16
|
½:31
|
1:68
|
½:36
|
7.0
|
36
|
Marchand, Erich
|
1:107
|
1:44
|
1:69
|
0:13
|
1:85
|
0:18
|
1:46
|
½:31
|
1:84
|
0:32
|
0:7
|
½:35
|
7.0
|
37
|
Jenkins, Thomas
|
1:111
|
½:14
|
0:26
|
½:108
|
1:54
|
1:27
|
0:32
|
0:38
|
1:101
|
1:85
|
0:19
|
1:80
|
7.0
|
38
|
Smith, George
|
1:120
|
0:20
|
1:104
|
½:25
|
0:39
|
½:55
|
1:82
|
1:37
|
0:15
|
1:56
|
0:34
|
1:67
|
7.0
|
39
|
Slifer, William
|
0:138
|
1:119
|
½:41
|
1:62
|
1:38
|
1:53
|
0:21
|
0:22
|
0:33
|
1:80
|
½:61
|
1:66
|
7.0
|
40
|
Tiers, George
|
1:133
|
0:8
|
1:54
|
1:32
|
½:24
|
0:21
|
½:47
|
0:78
|
1:67
|
0:51
|
1:99
|
1:57
|
7.0
|
41
|
Street, Frank
|
+:88
|
0:50
|
½:39
|
1:61
|
0:22
|
0:79
|
1:95
|
1:68
|
1:52
|
½:35
|
1:42
|
0:17
|
7.0
|
42
|
Shaw, Jack
|
1:127
|
0:18
|
1:107
|
1:115
|
0:14
|
½:128
|
½:79
|
1:99
|
½:25
|
½:26
|
0:41
|
1:72
|
7.0
|
43
|
McIlrath, Jim
|
1:141
|
0:24
|
1:90
|
1:27
|
½:19
|
1:50
|
½:11
|
½:85
|
½:44
|
0:14
|
½:28
|
0:25
|
6.5
|
44
|
Castle, Richard
|
1:124
|
0:36
|
½:55
|
1:122
|
1:17
|
½:19
|
½:26
|
1:24
|
½:43
|
0:23
|
0:29
|
½:51 |
6.5
|
45
|
Rohland, Marshall
|
+:144
|
0:13
|
1:95
|
½:17
|
1:96
|
½:8
|
0:25
|
0:29
|
1:64
|
1:78
|
0:15
|
½:55
|
6.5
|
46
|
Berry, George
|
1:96
|
0:9
|
1:91
|
=.34
|
1:86
|
1:67
|
0:36
|
1:56
|
0:14
|
1:99
|
½:26
|
0:24
|
6.5
|
47
|
Kane, George
|
1:128
|
0:15
|
1:116
|
½:50
|
½:29
|
+:135
|
½:40
|
0:17
|
0:10
|
1:70
|
1:82
|
0:26
|
6.5
|
48
|
Christman, James
|
1:131
|
0:1
|
1:86
|
½:96
|
1:79
|
0:24
|
1:128
|
0:8
|
1:111
|
0:9
|
1:63
|
0:20
|
6.5
|
49
|
Slater, Kathryn
|
1:125
|
½:7
|
1:29
|
0:26
|
0:11
|
1:57
|
0:50
|
½:64
|
0:79
|
½:86
|
1:90
|
1:87
|
6.5
|
50
|
Mego, Joseph
|
1:119
|
1:41
|
0:9
|
½:47
|
1:60
|
0:43
|
1:49
|
½:10
|
0:66
|
0:58
|
1:74
|
½:62
|
6.5
|
-
Hasta un total de 144 jugadores -
Javier
Cordero Fernández
(26
Junio 2017)
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